El maletín

Décimo quinto capítulo.
El otro.

Pensé que Antonini revelaría mayores detalles sobre el caso del maletín. Resulta que sus socios (Kauffmann y Maiónica) están bien informados. El turno, esta vez, fue de Kauffmann:
"Carlos Kauffmann, el gran amigo y socio de Franklin Durán, contestó con firmeza a las preguntas de la Fiscalía: 'Nadie quería que Alejandro Antonini dijera la verdad', insistió Kauffmann. 'Todos sabíamos que el dinero no era suyo. Lo manipulamos, le hicimos sentir culpable para que firmara el poder del abogado en Argentina. Ese era nuestro objetivo', reconoció. 'Asumo mi responsabilidad. Mi gobierno me pidió que hiciera algo y lo hice porque así conseguiría más poder, más dinero, nuevos contratos del Gobierno', subrayó tajante.
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El testigo aseguró que el dinero era de Pdvsa para la campaña de Cristina de Kirchner, que el presidente Hugo Chávez puso al director de la Disip, Henry Rangel Silva, al frente del asunto para solucionar el escándalo del maletín, que el entonces vicepresidente, Jorge Rodríguez, estaba al tanto de todo, y que Tarek El Aissami (actual ministro de Interior y Justicia) 'se encargaría de la contravigilancia'. Kauffmann ha pactado que él y su familia (su mujer, María Gabriela Jiménez, y sus 3 hijos) podrán quedarse en USA o en un 3er. país que los acoja. Kauffmann repasó las lucrativas compañías que posee a partes iguales con Durán desde 1998. Él tiene 43% de Venoco, Durán 43%. El resto es del Gobierno venezolano y otros socios. Tiene también una empresa de construcción al 50% con Durán. Y otra -Perforaciones Albornoz-, al 25% con su socio. Kauffmann posee 2 apartamentos en el sur de Florida, una empresa -Ocean Yacht- en Texas junto a otro venezolano, otro holding a medias con Durán y otra de helicópteros que vendió hace 2 semanas.
Mulvihill le preguntó: '¿Qué ha hecho el Gobierno venezolano con sus compañías?'
'Me lo han quitado todo desde el pasado lunes. Maionica y yo estamos en el mismo expediente. Todos mis activos han sido congelados por orden del fiscal general. No puedo hacer ninguna operación en mi país y tengo un pedido de Interpol'.
Otra vez el fiscal: '¿Han tomado alguna acción contra los intereses de Durán?'
Respuesta: 'No. La orden sólo me afecta a mí"' contestó Kauffmann.
'¡Objeción!', gritó el abogado de la defensa, Edward Shohat, quien al final del día pediría la anulación del juicio por estas preguntas que considera 'inapropiadas y deshonestas por parte de la fiscalía'.
La juez Joan Lenard desestimó su petición. Sí aceptó, sin embargo, 2 casos de corrupción señalados por la fiscalía: que Kauffmann y Durán pagaron 'cientos de miles de dólares' en sobornos a funcionarios de Pdvsa y que se reunieron con un oficial del Gobierno venezolano (a quien también pagarían) para discutir la venta de equipamiento policial y médico para un 3er. país. Carlos Kauffmann explicó cómo se inició la vinculación entre Venoco, de la que era el dueño de 50%, y el maletín de Guido Alejandro Antonini Wilson. Dijo: 'En un programa de televisión en el canal del Estado, mencionaron Venoco, cometiendo el error de mencionar a los antiguos dueños de la empresa'. Dijo que identificaron quién fue la fuente de esa información; sin embargo, habían resuelto el problema con el Canal 8 y no los atacaron más. "
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A juzgar por sus mociones, Kauffmann parecía dispuestos a enfrentar un juicio pero se declaró culpable en marzo pasado cuando el FBI descubrió que intentaba cometer un fraude migratorio para obtener un visado de residente en Estados Unidos a nombre de su esposa. Al recordar la salida de su esposa y sus dos hijas, que huían del escándalo de la valija y del peligro que corrían en Venezuela, su voz se quebró y no pudo contener el llanto. 'Esto es muy duro', comentó, tomando aire. La jueza suspendió la audiencia 5 minutos.
Al regreso de la pausa, Kauffmann tomó bríos y explicó extensamente, algunas veces tocando temas por los que no se le preguntó, la relación con Durán, su participación en la confabulación y los negocios con el gobierno de Venezuela. Los miembros del jurado escucharon atentamente los detalles del tren de vida de Kauffmann y sus socios: vuelos internacionales en un avión ejecutivo de su propiedad, residencias en Venezuela, bienes raíces en Florida, un negocio de yates en Texas y, lo que más les sorprendió, un saldo de US$ 28 millones en una cuenta bancaria en Miami.
Fuente: Noticiero Digital.